¿Existe un tratamiento psicológico de la obesidad?

Una de terapia frecuente tiene que ver con la detección, diagnóstico y tratamiento de dificultades psicológicas relacionadas con la obesidad y conductas vinculadas a problemas de sobrepeso.

 

Aspectos psicológicos en la obesidad y el sobre peso

Existen una serie conductas y patrones observables que considero de vital importancia tratarlos desde una perspectiva integral y profunda, buscando modificar las conductas que originan el problema, abordando la solución como una transformación genuina de desarrollo personal para que se sostenga con el tiempo.

Detrás del sobrepeso se esconden ciertos factores comunes que deben ser identificados y tratados de manera integral, porque no solo se trata de lograr una mejoría del bienestar físico, estético y de salud. Lo que se busca es un proceso de transformación personal como paso inicial hacia una nueva vida de plenitud.

Ansiedad y depresión

Es sabido que la ansiedad y la depresión son elementos que dificultan el bienestar, pero en la problemática de la obesidad y el sobrepeso juegan un papel relevante e inciden muchísimo, llegando a presentarse muchas veces como “el obstáculo a superar” del tratamiento.

Conviene tenerlos en cuenta, evaluar su existencia y sopesar la necesidad de programar trabajo terapéutico enfocado exclusivamente en estas dos variables.

 

Comportamientos vinculados con la comida

Se deben evaluar los factores desencadenantes de los hábitos alimenticios, desde las cosas más simples que cada persona tiene en cuenta a la hora de alimentarse, escoger sus alimentos y decidir cómo lo come. Es un proceso donde se detectan y exponen patrones de conductas compulsivas, como pueden ser tendencias familiares aprendidas, costumbres, vicios y vínculos establecidos entre diferentes emociones y la comida.

Distorsión o insatisfacción de la imagen corporal

Se suele tener una imagen corporal negativa o distorsionada de la realidad. Ambas situaciones generan malestar, sufrimiento y rechazo que se debe trabajar de manera focalizada para readaptar esas conductas y liberarse de la insatisfacción corporal.

Dificultad para relacionarse

Es que común que se presenten dificultades en las relaciones familiares y sociales. Pueden ser por causas externas (como el valor social de la delgadez y el consiguiente aislamiento de la persona que no cumple con él) o bien por causas internas, propias de cada individuo (generalmente relacionadas a cuestiones familiares) que puedan estar favoreciendo el problema del peso.

En personas con problema de sobrepeso pueden presentarse dificultades en el área sexual, agregando consecuencias psicológicas que conviene considerar como parte integral de la solución.

Baja autoestima

Se da con frecuencia en personas que padecen sobrepeso. La valoración física y emocional que tenemos de nosotros mismos determina en gran medida nuestros actos.

Si una persona solo se enfoca en las cifras de su peso y talla, construyendo un muro de información negativa, es muy probable que viva con un continuo malestar y rechazo hacia ella misma, dificultando su tratamiento y su bienestar cotidiano. El problema de la baja autoestima es que la persona no puede ver (y valorar) los logros que va obteniendo durante el proceso de cambio.

Estilo de vida

La dificultad del tratamiento radica en el mantenimiento de los logros conseguidos. En muchos casos solo se consiguen cambios superficiales que no se mantienen a largo plazo. Esto sucede cuando la relación entre la pérdida de peso está vinculada a la motivación del momento.

Es algo que se debe detectar para trabajar de prisa con acciones muy focalizadas y definitivas, porque nadie se mantiene eternamente motivado. Es imposible, tienes que saberlo y contar con las herramientas para manejarlo.

Se trata de un proceso relacionado a un propósito más grande que la simple disminución de las cifras de la báscula. Es un proyecto cuyo propósito es tu bienestar personal, donde el peso es parte de diferentes factores: de salud, estéticos, de amor propio, autoestima, paz interior, etc.

La pérdida de peso es una consecuencia de un proceso más profundo vinculado con tus metas personales, para lo que existen técnicas muy simples de trabajo con nuestros hábitos de descansos, calidad alimenticia, actividad física, calidad de sueño, identificación y manejo de situaciones de estrés, etc.

¿Existe un tratamiento psicológico de la obesidad?

La intervención psicológica en la obesidad es una realidad cada vez más necesaria y como cualquier otro proceso que enfrentemos buscando nuestro desarrollo personal, su tratamiento se focaliza en los factores causales.

Cada caso es diferente, no existe una receta única y universal y caer en generalidades puede ser un grave error.

Así y todo, existen una serie de objetivos terapéuticos iniciales que van mucho más allá del objetivo de entrar en un determinado vestido.

Es un proceso que se debe encarar con valor e inteligencia, sabiendo aprovechar la decisión tomada para resolver factores interrelacionados y estar dispuesto a complementar las sesiones de terapias breves y focalizadas con profesionales de diferentes ámbitos, como pueden ser nutriólogos, médicos especialistas, incluso un preparador físico en caso de ser necesario.